El maravilloso Ghee

El Ghee, conocido como “mantequilla clarificada”, es un producto obtenido mediante un proceso totalmente natural y de lenta cocción a partir de la mantequilla de vaca. Durante este proceso la mantequilla pierde todas las toxinas, las grasas saturadas y sólidos causantes de acumulación de grasas que ponen el metabolismo lento y lleno de colesterol.

Forma parte de la alimentación del pueblo hindú desde tiempos inmemoriales; ya los antiguos textos de la ciencia védica como el Rig Veda se refieren a él como sagrado, puro y exultante.

Cómo hacer el Ghee:
El Ghee no necesita refrigeración, una vez listo poner en un frasco o envase de puro vidrio. Se necesitarán 4 barras como mínimo de mantequilla pura sin sal, un tela porosa de algodón o un colador fino, una olla de acero inoxidable.

1. Poner la mantequilla a fuego medio hasta que se derrita y luego bajar el fuego a lento o ¾ y dejar cocinarse sola, ya no hay que hacer nada mas, taparla un poco, pero NO totalmente, ya que salpica un poco. La cocción tarda unos 30 minutos más o menos.

2. Observar como se va a formar una espuma arriba, hay que dejarla y no quitarla ya que tiene cualidades medicinales, esta espuma se va a evaporar y se va a poner mas durita y la mantequilla se va a poner transparente, estará lista cuando el fondo este un poquito doradito y la espuma esté un poco durita o que sea mucho menos y se pueda ver el fondo de la olla. Otra señal de que está listo, es que al tirar una gota de agua en él, esta salpica. También se puede hacer “la prueba del algodón”: se retira la olla del fuego y se coge un trocito de algodón y se moja un poquito en el ghee y se comprueba directamente en el fuego si chisporrotea… si ya no chisporrotea es que ya no hay agua y está hecho.

3. En este momento apagar y retirar del calor y dejarlo reposar durante 20 minutos y luego colarlo con la tela o el colador a un envase de vidrio seco y limpio. Bendecirlo, ya que viene del sol, plantas, vaca, leche, mantequilla y ahora tú. Disfrútalo.

Hay que tener mucho cuidado cuando empieza a cambiar el color del ghee, ya que si dejamos que se haga mucho, cogería un color demasiado oscuro y sería un ghee pasado o quemado. Por eso, es recomendable ir probando con el algodón y si no está hecho continuar. De todas maneras si esto ocurre no tirarlo, ya que puede servir como hidratante para la piel (entre otros muchos remedios).

Propiedades nutricionales y medicinales:

• Es un sustituto de la mantequilla… se puede comer en tostadas para el desayuno o en recetas de cocina.
• Se puede sustituir por el aceite a la hora de cocinar.
• Es un buen hidratante de la piel, así como un buen protector. También sirve para las quemaduras del sol.
• Es un buen lubricante para los ojos y un potenciador de la vista, por lo que se puede utilizar cada mañana directamente en lo ojos (se pone con la yema del dedo en el lagrimal y se extiende).
• No engorda aunque las personas obesas deben tomarlo con prudencia.
• El Ghee equilibra los fluidos/residuos corporales (heces, orina y sudor).
• Es un buen vehículo de transporte a nivel celular.
• Incrementa la fertilidad.
• Elimina el exceso de bilis.
• Se lo utiliza en el tratamiento de gastritis y úlceras.
• Es útil durante el proceso de desintoxicación, para la anemia y los desórdenes de la sangre.
• Incrementa la memoria y la inteligencia.
• Demora el envejecimiento de los tejidos
• Es Tridosha (es bueno para todos los Doshas, Vata, Pitta y Kapha, pero en exceso provoca obesidad).
• Aumenta el Agni (ayuda en la digestión).